El 21 de febrero de 2018 es una fecha que quedará marcada en los anales de la historia del departamento del Quindío. Y no es para menos, la noche de ese miércoles la compañía quindiana Teatro Azul de Armenia fue la encargada de abrir la temporada de teatro en el máximo escenario de esa modalidad cultural en el país: el Teatro Colón de Bogotá, el teatro nacional de Colombia.

El grupo Teatro Azul de Armenia bajo la dirección de Leonardo Echeverri Botina y la codirección de Ximena Escobar Mejía, fue seleccionado por la grandiosidad de su obra ‘Hominun, perdón por ser, una reflexión en torno a la humanidad, la memoria y los procesos de reconciliación. Es la primera vez que una agrupación cultural del Quindío llega al escenario del mítico Templo de Teatro de Colombia, el Colón.

Escrita por Leonardo Echeverri Botina ‘Hominun, perdón por ser’ tuvo su inauguración el 7 de abril de 2017 en la sede de Teatro Azul de Armenia. Estuvo en escena en la programación de los 125 años del teatro Colón también en 2017 pero su máximo logro fue dar apertura a la temporada 2018 en el mismo escenario del emblemático Teatro Cristóbal Colón que abrió sus puertas El 12 de octubre de 1892 para convertirse en el único teatro nacional.

‘Hominun, perdón por ser’ tuvo su segunda presentación en el Colón el pasado 22 de febrero y fue anunciada con bombos y platillos por los principales medios de comunicación del país. La obra había sido escogida por el ministerio de Cultura para hacer parte de la Plataforma de la Artes Escénicas de Colombia, Palco, una ruta de internacionalización en la que programadores internacionales visitaron varias ciudades del país conociendo propuestas teatrales de calidad. Dicha función se realizó el 9 de octubre de 2017 en Teatro Azul.

Con la obra ‘Hominun, perdón por ser’ también se realizó una temporada de funciones con estudiantes de las instituciones educativas públicas del Quindío, durante el segundo semestre del año pasado. En esta actividad participaron cientos de jóvenes de los colegios cuyos rectores aceptan el reto de una educación con calidad, fuera de las aulas de clase, y lo decimos porque muchos no han dejado mover a sus estudiantes de los planteles más que por negligencia por ignorancia ante los nuevos retos educativos.

En ‘Hominun, perdón por ser’ tres mujeres en escena reviven el holocausto nazi, el genocidio de Ruanda y el conflicto armado colombiano. Más que desentrañar las voces de la violencia a lo largo de los tiempos, el espectáculo plantea los aspectos fundamentales del conflicto y propone una mirada contemporánea sobre los procesos de reconciliación.

Es de anotar que las obras de Teatro Azul están escritas de acuerdo con los momentos históricos por los que atraviesa la sociedad colombiana. ‘Hominun, perdón por ser’ es un llamado al perdón entre los colombianos. Pero es más destacable que los primeros que disfrutaron de la obra fueron los estudiantes de los colegios públicos de Armenia y del Quindío, quienes han tenido lugar de preferencia para Teatro Azul en otras obras como ‘Sin sentido’, una crítica a la educación colombiana, o como ‘Una ventana al infinito’ sobre la trata de personas, un llamado a la juventud; o como ‘Libelos y memoria’ una obra conmovedora de la violencia en Colombia a través de su historia hasta nuestros días.

Con el propósito de tener un grupo para crear obras que pudieran ser compartidas con personas de todas las latitudes de este planeta azul, Teatro Azul fue creado en 1998. Claudia Milena Restrepo Sierra, María Cristina Restrepo Sierra, Alejandro Llano Gómez, Natalia Chavarría Téllez, Ximena Escobar Mejía y Leonardo Echeverri Botina, han hecho grandiosa esta compañía. Un puerto para crear y soñar constantemente, una máquina de sueños, entendiendo la palabra soñar como trabajar por un Quindío grande.

Nos quitamos el sombrero ante los integrantes de Teatro Azul, compañía que nos enorgullece, que venciendo obstáculos ante la mirada indiferente de muchos de nuestros gobernantes, ha llevado la cultura del Quindío a los máximos escenarios nacionales e internacionales, con lo que ha demostrado el verdadero amor por su tierra a la que consideran un paraíso en donde el verde de los cafetales y platanales debe ser el espacio cultural para una convivencia llena de paz y de alegría. Felicitaciones Teatro Azul.