Casi un mes de suspensión de la actividad ha hecho estragos en algunos clubes. Los más poderosos de Europa como el Barcelona, el Bayern Múnich o el Real Madrid han negociado con sus plantillas para que se reduzcan los salarios y así poder afrontar los gastos con los ingresos que siguen teniendo por diversos contratos. 

Sin embargo, esos equipos son excepciones dentro del mundo FIFA, porque la enorme mayoría de las instituciones no maneja ese nivel de ganancias.

Es así que Deportivo Coopsol, de la segunda división de Perú, rescindió los contratos de toda su plantilla al aducir que no podía pagar los salarios mientras el fútbol esté suspendido por la emergencia sanitaria del COVID-19, pero con la promesa de volverlos a contratar si finalmente se disputa el torneo.

El cuerpo técnico y los jugadores del Coopsol se enteraron de sus despidos por intermedio de una carta del presidente del club, Freddy Ames. En la misiva, el máximo responsable de la institución argumentaba que es muy probable que el campeonato de la segunda división no se llegue a disputar tras haber sido suspendido indefinidamente.

El torneo de segunda del Perú estaba previsto para inicios de mayo, pero está suspendido desde que a mitad de marzo fue decretado en el país el estado de emergencia, que incluye una cuarentena obligatoria para toda la población y el cierre total de fronteras.