El 2020 terminará con el mismo costo del peaje el cual no se incrementará a partir de la inauguración de las obras en el paso de la Cordillera Central entre los departamentos del Quindío y Tolima, sin embargo, la caseta será trasladada a un sitio más adelante, afirmó el director nacional del Invias Juan Esteban Gil Chavarría.

El funcionario señaló que el reajuste en el valor del pago que se efectúa como derecho para circular por el túnel de La Línea se llevará a efecto en los primeros meses de la próxima vigencia y no será el peaje más costoso del país.

En la apertura de la programación denominada La Semana del Túnel, Gil Chavarría entregó detalles de la manera como se llevó a efecto la obra de ingeniería más importante del país, teniendo en cuenta el grado de dificultad por ser el cruce de la cordillera y los retos que implicó su geología.

Dijo que se trata del túnel más largo del continente y el primero del país construido con túnel de rescate paralelo al principal, explicó que el de rescate consta de galerías cada 500 metros que lo conectan con el principal y que existen hasta 40 metros de distancia entre uno y otro.

Recordó el funcionario que en 1999 se reactivaron los estudios para la construcción del túnel de La Línea, momento en el que expertos en el mundo decían que era imposible cruzar la cordillera y que se trataba de un proyecto inviable.

Indicó que, pese a las dificultades presentadas el túnel piloto terminó en agosto del 2008, para iniciar en el 2009 las obras del principal, el cual, entre los muchos inconvenientes superados, se destaca que en noviembre de 2016 el contratista terminó el plazo sin cumplir con sus obligaciones contractuales y al empezar este gobierno, era una obra desfinanciada y a punto de convertirse en un elefante blanco.

El túnel funcionará en un solo sentido y no en los dos, debido a que el problema es tener una carretera estrecha con un carril en cada uno de los sentidos, por lo que la dificultad no es de capacidad sino de nivel de servicios.

Durante el encuentro del director del Invias con la comunidad del Quindío, el funcionario informó que la vía presenta 850 horas de cierre al año, casi 200 accidentes anuales, derrumbes, vehículos varados, por lo que la solución es tener dos carriles por sentido, para mejorar la velocidad y se piensa que el segundo túnel se requiere para dentro de 20 años.

Destacó las bondades de la obra al señalar que 21 kilómetros de ahorro por el Alto de la Línea, 13 kilómetros de diferencia entre uno y otro corredor.

Al referirse a la seguridad vial en torno a la operación de la vía, señaló que se debe mejorar en materia cultural y destacó la experiencia que se presenta desde que entró a funcionar el puente helicoidal donde se han registrado 19 accidentes debido a que el ciclista se pega a tractomula, conductores embriagados, fallas por recalentamiento de los vehículos y en general falta de cultura ciudadana.

Destacó la puesta en operación de la última tecnología con trampas de frenado y otros elementos que garantizarán la seguridad, sumados a la presencia de autoridad, capacitación para que los usuarios de la vía se acostumbren a manejar en forma tranquila y segura sin correr para llegar a las casas, mejorando además el factor sicológico.

Este 4 de septiembre se inaugurarán 5 túneles, entre ellos el principal, el de rescate y otros tres del lado del Quindío, además 5 puentes 3 del Quindío y dos en el Tolima y la vía desde Cajamarca hasta Calarcá equivalente a 13.4 kilómetros, de los 30 que hacen el total del proyecto que en abril estarán totalmente terminados, en doble calzada.

Entre las mayores dificultades el funcionario se refirió a la repotenciación del puente de la Herradura que ahora se llama Yarumo blanco, al hecho de atravesar una de las regiones más sensibles en el país en materia de fauna y flora tan especiales y al reto técnico superado, de hacer un túnel a esa altura de 2 mil 500 metros sobre el nivel del mar.