Por Luis Fernando Franco C.

Monseñor Carlos Arturo Quintero Gómez, Obispo de la Diócesis de Armenia, en visita al municipio de Génova, cumplida en la mañana del último lunes, hizo una amplia exposición conducente a la reactivación del programa Ser vida, la vida es sagrada, por medio del cual se establecen las rutas para evitar el suicidio.

Aunque el plan tuvo un inicio al finalizar el pasado año, la situación de pandemia generó una parálisis en el mismo, y es ello el motivo de la reactivación, que para la ocasión ha convocado a representantes de diversos estamentos de la localidad.

De acuerdo a las manifestaciones del prelado diocesano, el fenómeno social de la autoeliminación se ha convertido en un verdadero flagelo en la región, por lo que la Iglesia, mediante la creación de espacios de comunicación y la integración interinstitucional, busca la conformación de rutas de atención ante la ideación suicida, apelando a la formación de grupos, apóstoles de vida, para fortalecer la seguridad de las gentes mediante acompañamientos académico y espiritual.

De otra arte el purpurado quindiano hizo referencia a las convocatorias hechas por el Papa Francisco sobre la defensa de la propia humanidad y el mantenimiento de la hermandad entre los hombres, así como la defensa del medio ambiente y la atención al denominado cambio climático, situaciones que vienen afectando la marcha de la humanidad.

Para los próximos días, los integrantes de las entidades comprometidas en el tema Ser vida, la vida es sagrada, estarán definiendo nuevas tareas que buscan cubrir todos los espacios de la municipalidad, llevando un mensaje de seguridad, tranquilidad y plena atención a los sucesos de autoeliminación que puedan detectarse.