Algunos habitantes de Calarcá vienen realizando ante medios de comunicación y la comunidad, una serie de denuncias relacionadas a situaciones que vienen ocurriendo en las veredas Pradera Baja y alta.

Las irregularidades tienen que ver con la constante actividad donde se hacen terraceos, se abren accesos, se deforesta e incluso hasta la orilla de una quebrada que pasa por el lugar y que termina contaminada, e igualmente se construyen casas y las conocidas ramadas, muchas de ellas forradas en plástico pero la mayoría sin planificación.

Según lo dan a conocer los denunciantes también se están haciendo cultivos y se contamina el medio ambiente con la constante quema de elementos orgánicos como huesos, sobre todo en horas de la noche.

Por lo anterior los ciudadanos se preguntan a quién o a quiénes benefician estas actividades, ya que la vía se encuentra en buen estado y constante mantenimiento.

Lo anterior parece no tener control pues las labores se extienden sin orden de las autoridades que incluso dicen ellos, no ven el mal que se le hace al municipio, en especial a sus recursos naturales y del agro.

Iguales problemas se dan a conocer en la vereda Pradera Baja, ya que en laderas de las cañadas van creciendo, algo que coloquialmente ellos llaman el sótano de Calarcá.

En esta parte igualmente se terraceos, se crean entradas, se invaden predios del municipio, áreas de cesión y propiedades privadas. Se construyen tugurios, casas y poco a poco se crean los llamados barrios subnormales.

En términos de normas de urbanización, construcción y usos del suelo, este tipo de viviendas en mal estado tienen todos los componentes y las condiciones de precariedad y déficit de servicios públicos, sin contar con que no se tienen título de propiedad.

Todo lo anterior reflejándose en la baja calidad de vida, insalubridad, drogadicción, violencia, inseguridad, desconfianza hacia las instituciones gubernamentales, y alto riesgo geológico.

Los cuestionamientos de los denunciantes son dirigidos a la alcaldía de Calarcá, Planeación Municipal, la CRQ y el Sistema de Prevención y Atención de Desastres, pues estos asentamientos subnormales se ubican en el sector de la variante sur, en las cañadas dentro del perímetro urbano así como fuera de él.

Todas estyas situaciones perjudican no solo el medio ambiente sino también el correcto desarrollo urbano. A raíz de estas inconsistencias y ausencia de autoridad surgen muchos interrogantes de quienes dan a conocer esta situación, uno de ellos es la existencia de permisos de la alcaldía de Calarcá y de la Corporación Autónoma Regional del Quindío o si se contempla todo este modelo de apertura en el Plan de Desarrollo.

Y como los ciudadanos ellos puntualizan: ¿Acaso no hay autoridad para detener eso?