Es claro la capacidad que tienen los animales de sentir y expresar sus emociones, aunque su manera de hacerlo sea distinta a la de los seres humanos; de hecho, son los sonidos y el lenguaje corporal lo que les permite hacerse entender, y con lo que las personas pueden identificar también qué les pasa, si están felices, si están tristes o incluso si algo les duele.

En el caso de los perros, por ejemplo, suelen mover su cola de lado a lado cuando algo les ha provocado una gran alegría, acercar sus cabezas cuando desean ser consentidos, mostrar sus dientes y gruñir cuando algo no les ha gustado, y llorar cuando la tristeza se ha apoderado de ellos; precisamente sobre esto último, uno de los grandes interrogantes de muchos dueños es si los caninos lloran al igual que las personas.

Pues sí; los perros también lloran cuando se sienten mal, aunque cuando lo hacen de sus ojos no salen lágrimas como sí sucede en los seres humanos; en su caso, suelen emitir un sonido bastante particular que es una mezcla entre un gemido y un aullido. De hecho, si ves lágrimas en los ojos de tu perro, no te confundas, no está llorando porque esa no es la manera en la que lo hacen, podría ser por una infección ocular, humedad, el cambio de temperatura en el ambiente, productos químicos o sustancias de algunos alimentos, el sol, entre muchos otros factores.

Son varias las razones por las que un perro puede tener estos quejidos que demuestran malestar o tristeza, y si bien es cierto que muchas de ellas pueden resolverse en el instante, otras son un poco más grave porque podría ser producto del dolor en alguna zona de su cuerpo. Estos son los motivos más comunes del llanto de los caninos.

• Miedo: puede haya sido producida por un sonido fuerte o un objeto desconocido, y en este caso tu perro lo demostrará con el llanto; sin embargo, también lo hará por la ansiedad, como cuando no puede conseguir algo que desea o incluso cuando se queda solo en casa.
• Para llamar la atención: este llanto es porque necesita algo de ti y esta es la única manera en la que puede hacértelo saber; probablemente se ha quedado sin agua o sin comida, o quiere salir para orinar o defecar.

• Dolor: llora porque algo le está molestando o tiene alguna enfermedad; puedes confirmar este caso palpando y estirando las diferentes partes de su cuerpo con mucho cuidado, o llevándolo al veterinario cuando no identificas la razón de su llanto.
• Emoción: la emoción también provoca ansiedad, por ende, también puede surgir llanto en estas situaciones; por ejemplo, cuando llegas a tu casa notarás la felicidad de tu perro y llorará hasta que lo saludes, pero una vez haya finalizado este estímulo, los sonidos también cesarán.
• Es cachorro o anciano: es normal que los cachorros lloren mientras se adaptan a su nuevo entorno; además, en los ancianos también, pues sufren cambios producidos por el envejecimiento mental y físico.