Alrededor de 60 personas le cambian la cara al parque Cafetero con su participación jornadas de aeróbicos nocturnos. La historia de un quindiano que cumple 20 años recorriendo sectores vulnerables de Armenia para dar una esperanza de vida a través del deporte.

Por Rubén Darío Varela

A Katherine Cadena, poco o quizá nada le interesa tener que gastar de su presupuesto los transportes para movilizarse desde el barrio La Patria en donde reside, hasta el polideportivo del parque Cafetero en la ciudad de Armenia para asistir a la clase de aeróbicos a cargo de Sebastián Montiel, y las cuales se llevan a cabo en este lugar público los días lunes, miércoles y viernes entre las 7:00 p. m y las 9:00 p. m.

Y aunque no parezca ninguna novedad, al igual que Katherine, muchas personas de todas las edades llegan desde diversos sectores de la capital quindiana a ejercitar su cuerpo, incluso superando en ocasiones un número mayor a sesenta alumnos que contagiados con el ritmo de la música, se la juegan por el amor al deporte al ejercicio y de paso a cambiarle la mala reputación al parque Cafetero.

“Los días lunes se trabaja todo lo que son ejercicios de fortalecimiento para piernas, brazos, cadera, abdomen, etc.; los miércoles es kid boxi, es decir, defensa personal, y los viernes se hace rumbo terapia que se hace con clases de baile. Hace seis años que participo y me parece un programa fenomenal que está abierto para las personas que deseen participar”, expresó Katherine Cadena.

Esperanza para la gente

Gracias a esta iniciativa, hoy en día cada vez es más fácil transitar con seguridad por el este parque en las noches, y todo porque un quindiano, de esos que se dicen que son de pura cepa, se le ocurrió la idea de recorrer los sectores de Armenia, especialmente los más marginados para brindarle a los ‘cuyabros’, la posibilidad de ver en el deporte una manera amable de hacerle frente a muchas de las realidades que nos aquejan.

Ahora ya son 20 años en este 2018 que Sebastián Montiel cumple recorriendo cada comuna, cada barrio, cada rincón de Armenia con el propósito de bridarle la posibilidad a las personas, y en especial a los jóvenes la posibilidad de alejarse de las drogas y ver en el deporte una salida para tener hábitos más saludables, sin importar prejuicios sociales como la edad, la contextura física y la falta de dinero en la mayoría de los casos para pagar un gimnasio.

“Las clases se realizan en tres secciones, fundamentales y básicas para personas que generalmente son sedentarias y apenas se encuentra incursionando en el deporte. Estas clases se dictan a las 7:00 p. m, y también se tiene las clases avanzadas que se dictan entre 8 y 9:00 p. m y que son exclusivas para personas que ya cuentan con una rutina de ejercicio”, indicó Montiel.

Esta linda actividad de ayuda por los demás, se hizo posible hace 20 años gracias al proyecto presentado por Sebastián Montiel al Instituto Municipal de Recreación y Deporte de Armenia, Imdera quien recién graduado de la Licenciatura de Deporte y Recreación de la Universidad del Quindío, recibió apoyo de esta entidad para hacer posible la iniciativa de la que se han beneficiado cientos y cientos de personas en estos largos 20 años en la ciudad de Armenia.

Según Sebastián Montiel el objetivo es recorrer no solo Armenia, sino otros municipios del departamento siempre con el propósito de inculcar el valor y la importancia de ejercitar el cuerpo y hacer el deporte para así noquear el sedentarismo y los más importante, ganarle la batalla a los malos hábitos como la droga, el alcohol, entre otros.