La Universidad del Quindío adoptó un espacio en donde se sembraron aproximadamente 150 plántulas de café. Este jardín cafetero, símbolo representativo de la región, tiene alrededor de un año y se espera que este diciembre se pueda obtener la primera cosecha con sello uniquindiano.

El objetivo es obtener, a mediano y largo plazo, un café con sello uniquindiano, no en cantidad, sino en calidad, pues las plántulas sembradas, aunque son pocas, son de diferentes variedades. Asimismo, al ser una especie de porte bajo, ornamental, melífera y siempre verde, no va a afectar la infraestructura de la institución y, al contrario, le dará esa representación cafetera de la que venimos.

El café es una planta originaria de Etiopía. En el siglo XI no sólo se encontraron los primeros granos de café, sino también las propiedades contenidas en su fruto. Colombia, a nivel mundial, es conocido por ser una tierra cafetera, y el Quindío no se queda atrás.

En 1960, cuando se creó la Universidad del Quindío, se adquirió el predio llamado finca La Aldana, de tradición y producción cafetera, con alrededor de 26 hectáreas. El alma mater, en homenaje a ese origen que nos representa y a la producción cafetera que nos caracteriza, plantó 150 árboles de café en la zona verde del bloque administrativo 1 del campus universitario.