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Judicial  |  08 mayo de 2018  |  12:00 AM |  Escrito por: Rubiela Tapazco Arenas

“Carlos Mario Álvarez le vendió el alma al diablo el día que suscribió el pagaré”: juez que lo envió a la cárcel

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El juez Fredy Mondragón habló en forma pausada, se tomó su tiempo, reconoció las cualidades y calidades humanas de Carlos Mario Álvarez Morales el alcalde de Armenia encartado por presuntos delitos de corrupción en cuanto al manejo de los recursos de valorización.

Habló el juez Cuarto Penal Municipal con Funciones de Control de Garantías de los problemas jurídicos a resolver para decretar la medida de aseguramiento, señaló que no se debaten responsabilidades sino inferencia razonable, aludió a 1.500 folios con declaraciones, testimonios, contratos adjudicados por Carlos Mario Álvarez a Fernando León Diez y vídeo de la Fiscalía, todos esos elementos e interrogatorios tienen peso, por lo tanto, debió hacer un análisis de manera sistemática.

Artimaña

El profesional se toca la cabeza, lee varias definiciones de corrupción, habla de las formas de corrupción afirma que los actos de corrupción son secretos y privados y agrega que la Fiscalía ha venido haciendo una investigación en la que tres personas se reunieron para cometer el hecho y dos hablaron.

De la declaración de Congote se establece cómo es la artimaña para manipular, se refiere a la forma para adecuar los pliegos para que un contratista sea beneficiario de una licitación en el gobierno del actual alcalde de Armenia.

Se sabía que Carlos Mario Álvarez Morales no tenía el músculo económico para una campaña y el gobierno anterior tenía que garantizar la continuidad en el poder.

La corrupción tiene un gran poder

Avanzó en su intervención y fue dando las respuestas que todos en la sala y fuera de ella esperaban ansiosos, dijo que los argumentos de la Fiscalía construyen una inferencia razonable de autoría de los delitos imputados por la Fiscalía.

El juez añadió que somos en Colombia muy inteligentes y maliciosos, la corrupción tiene un gran poder para evitar ser detectada y efectivamente se unieron para lograr un beneficio propio, ellos tenían que tener una persona de confianza, estas son conductas reprochables si tienen finalidad ilícita.

Al referirse a Carlos Mario Álvarez Morales dijo que puede ser una muy buena persona, pero es cuando más se le debe exigir, sumado a que es un docente con maestría en ética y mucha gente votó precisamente pensando que era una persona alejada de las maquinarias.

La semilla envenenada puede que esté realizando muy buena labor ahora, pero una semilla contaminada va a generar un árbol contaminado, es decir, cuando Carlos Mario Álvarez se comprometió con esas personas todo cambió, por ello es necesaria la medida de aseguramiento, es claro que él tiene el poder para destruir o interferir en la investigación, anota el juez.

Delitos extremadamente graves

Dijo que es necesario mantenerlo privado de la libertad en la cárcel por cuanto podría afectar, ocultar o dar órdenes para evitar la investigación, tiene el poder sobre los secretarios del despacho y aquí hay que defender a la víctima que son todos los armenios.

El juez indicó que Álvarez Morales presuntamente cometió delitos extremadamente graves “porque estos delitos son más graves que el que comete el ladrón vulgar de la calle. Porque los corruptos nos roban la salud, la educación y la calidad de vida de las personas”.

Dijo que todos estaban confabulados en un círculo al que ingresó Carlos Mario Álvarez quien presuntamente cometió cuatro delitos de extrema gravedad que afectan a la comunidad, en consecuencia, sí hay una organización delincuencial.

Armenia, víctima

Se refirió a que Armenia viene siendo víctima de este tipo de conductas desde hace 16 años y fue enumerando cada uno de los gobiernos que terminaron con investigaciones y condenas por hechos delictivos.

Señaló que la gente más que brava se siente triste porque el día que Carlos Mario Álvarez suscribió ese pagaré le vendió el alma al diablo. Se generó un gran daño hay mucha tristeza una persona buena se dejó influenciar por otras malas.

“Una persona que comete este tipo de hecho es más peligroso con un lapicero en la mano, que un delincuente en la calle con un cuchillo, porque se trata de una persona educada, formada”, concluyó su exposición el juez Cuarto Penal Municipal con Funciones de Control de Garantías.

 

 

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