La directora de la Unidad para las víctimas en Colombia, Yolanda Pinto Afanador destacó los siete años que se cumplen este 10 de junio, de la entrada en vigencia de la ley de Víctimas.

En el departamento del Quindío miles de víctimas se mantienen a la expectativa por el cumplimiento de los acuerdos de paz y que se logre por fin la verdad, justicia y reparación para ellas.

Dijo Pinto Afanador que, mediante esta norma, por primera vez en la historia del país, se reconoció la responsabilidad del Estado con los sobrevivientes de más de cinco décadas de conflicto y estableció medidas concretas para su atención y reparación integral.

Largo camino

Afirmó que” para llegar a la expedición de esa ley, las víctimas ya habíamos recorrido un largo camino, algunas por décadas, para lograr desde el simple reconocimiento de nuestra condición hasta el pleno restablecimiento de nuestros derechos. Con la Ley, obtuvimos ese reconocimiento que buscábamos, pero el camino hacia la reivindicación de nuestros derechos aún estaba por delante”.

Agregó Yolanda Pinto que en los últimos siete años, el gobierno y las víctimas han recorrido juntos dicho camino y aclaró que por supuesto, no ha sido una relación exenta de dificultades y de desencuentros, admitió que no siempre ha sido fácil ponerse de acuerdo sobre lo que las víctimas esperan y lo que la realidad, especialmente la presupuestal, impone y señaló que también han cometido errores.

Acuerdo

Anotó la directora de la Unidad para las víctimas que hay algo en lo que siempre han estado de acuerdo, en caminar juntos. Como lo dijo el Presidente Santos, al sancionar la Ley, “si hemos tenido víctimas, si aún siguen produciéndose víctimas, vamos a ubicarnos y a pararnos en la orilla que nos corresponde: ¡al lado de ellas, de su parte, abrazando y comprendiendo su sufrimiento!”.

En su condición de víctima del conflicto armado en Colombia aseguró Pinto que “siempre hemos sabido cuál es la orilla que nos corresponde, la de las víctimas. Es por nosotras que se firmó el acuerdo con las Farc y es por nosotras que se debe seguir implementando para que, como decimos las víctimas, “a nadie más le pase lo que a nosotras nos pasó”.

Vigencia

Al referirse al futuro, indicó que es normal, ante un próximo cambio de Gobierno y a falta de solo tres años para que concluya la vigencia de la ley de Víctimas, que algunas sientan incertidumbre, pero el camino de los sobrevivientes del conflicto no ha terminado. Aún queda mucho por avanzar y las víctimas, que por décadas tuvieron que enfrentarse solas al rechazo y a la indiferencia, no van a detenerse ahora. Lo importante es que el país ahora sabe que debe caminar a su lado.