Las primeras veces que Marco Tulio Marín tuvo contacto con los Jeep Willis fue cuando era niño. Para ese entonces criado en el campo veía como su abuelo llevaba en el vehículo todo tipo de cargas, desde café, plátano, remesas y campesinos que bajaban o subían al pueblo los fines de semana. El carro transitaba como si nada por los caminos escarpados, empinados y agrestes del Quindío, como pasa en la actualidad.

Desde aquellos años para Marco Tulio ese gusto se ha convertido en una admiración total, una obsesión, casi en un fanatismo. Tanto que aun siendo bombero en Armenia hace casi 20 años, recuerda que con sus compañeros participaron en más de una ocasión del popular desfile del Yipao en las fiestas de la ciudad, y hoy en día, con miles de kilómetros de por medio es propietario de un Willis pintado con la bandera de Estados Unidos.

Inmigrante
Por esas razones que solo el destino podría explicar, Marco Tulio Marín ya lleva 17 años viviendo en New York, más exactamente en Queens. Dedicado a la mecánica y restauración de autos como sustento económico, sigue vinculado eventualmente con el cuerpo de bomberos norteamericano, pero más allá de todo lo que empacó en su maleta cuando partió desde estas tierras cafeteras en busca de un mejor futuro, llevaba en su corazón ese mismo amor que nació desde niño por el Jeep Willis.

Incluso podría decirse que ahora esa pasión es más grande ya que por casualidad, el país que le abrió las puertas es el mismo donde el vehículo que tanto quiere, fue diseñado para propósitos bélicos durante la segunda guerra mundial y solo después, en 1947 comenzaron a llegar a Colombia adaptándose de inmediato a la topografía difícil de las montañas colombianas.

La propuesta de un Willis por la Quinta
Pero a la historia de ese amor por el legendario Willis le faltaba un empujón para llevarlo a otro nivel. Daniela Marín, hija de Marco Tulio, lo motivó para que ese mismo desfile del Yipao que tanto lo llenaba de orgullo y alegría en las fiestas de la Ciudad Milagro lo pudiera realizar en Estados Unidos.

No era fácil querer darle vida una idea tan compleja, pero con ese tesón y trabajo arduo que nunca le ha faltado a su personalidad, Marco se puso a la tarea de encontrar amigos, contactos y sobre todo quienes en New York o sus alrededores tuvieran el popular carro para ponerlo a desfilar.

Resultaron solo cuatro voluntarios y como Yipao sin chapoleras, arrieros y café no está completo, desde Colombia, gracias a la gestión y apoyo de sus amigos Daniel Suarez, Omar Hincapié y Jorge Díaz, logró hacer que le mandaran los trajes completos de las campesinas con las tallas precisas para que no desentonaran.

El permiso para que se pudiera realizar el primer evento del Yipao en New York fue gestionado por la organización del Desfile de la Hispanidad, certamen que se lleva a cabo cada año en octubre y donde tendría un espacio asegurado, parte de la travesía colombiana del Jeep.

El día soñado
Luego de todos los trámites, gestiones, llamadas, correos, trasnocho y mucho trabajo, llegó por fin el día soñado que tanta planeación necesitó. El 22 de octubre del año 2017, durante 30 cuadras Marco Tulio y todos sus amigos y compatriotas fueron el centro de atención en la Quinta Avenida de New York, cuando los cuatro carros Jeep Willis, que en Colombia son un ícono cafetero, comenzaron a desfilar con sus chapoleras, arrieros y carga llamando la atención.

Los organizadores no lo podían creer. Parecía un espejismo. Fotos y videos del Yipao en la capital del mundo se hicieron virales en internet. A Marco Tulio le hicieron entrevistas en prensa radio y televisión, pues un pedazo de Colombia estaba presente en una de las principales calles de norteamerica y todo gracias a su trabajo y el de sus colaboradores.

Un pique de exportación
Pero lo mejor del desfile llegó cuando uno de los cuatro Jeep, acondicionado para las piruetas y con un buen piloto de esos que solo estos carros pueden tener, hizo su tradicional pique muy lejos de las calles de Armenia o Calarcá, esta vez frente a la torre Trump, uno de los rascacielos más importantes del mundo, propiedad del magnate y actual presidente de Estados Unidos Donald Trump.

Hoy es otro gran día
Desde ese momento del primer evento a Marco Tulio y a sus amigos no paran de invitarlos a otras ciudades norteamericanas para que lleven su pedazo de Colombia en el tradicional desfile de Yipao que ya cuenta con 10 carros. Uno de esos eventos se hace realidad hoy domingo 22 de julio en el festival de Orgullo Colombiano, que se celebrará en el parque Flushing al norte de Queens en New York, desde las 11:00 a.m. hasta las 6:00 p.m.

Embajadores y acompañantes
En esta celebración que sirve para conmemorar desde la distancia el día de la independencia colombiana, habrán eventos culturales, artísticos y también estará presente una delegación calarqueña encabezada por la alcaldesa Yenny Trujillo, quien para Marco Tulio Marín ha sido una ayuda invaluable e incondicional al momento de encontrar el apoyo para hacer del Yipao en Estados Unidos una realidad.

La ruta larga del Yipao
Pero esta gesta no termina hoy en New York. Quizás vayan hasta Boston, New Yersey u otras ciudades de Estados Unidos para que Marco Tulio siga exhibiendo su orgullo y pasión por los Willis, ahora haciendo patria en el extranjero con un sueño que nunca se imagino podía ser posible, y llevando felicidad e identidad nacional a otros colombianos que desde miles de kilómetros de distancia siguen disfrutando con nostalgia el desfile del Yipao casi igual a como lo vivían en su natal Quindío.