En una verdadera revolución educativa se ha convertido la denominada Primaria Artística implementada por la gobernación del Quindío en cabeza de Carlos Eduardo Osorio Buriticá.

Y aunque son muchos los aciertos de la actual administración departamental, el cura Osorio Buriticá dio en el blanco con la atención educativa de los niños desde los primeros años escolares. Una educación de avanzada, pues está comprobado científicamente que el desarrollo emocional del ser humano a través de las artes abre más el cerebro a la compresión y el conocimiento en todos los sentidos.

La Primaria Artística que se viene adelantando en varios de los colegios de los municipios del departamento es el verdadero inicio de la cacareada jornada única, convertida esta, en otras instancias distintas, en una negación de la calidad de la educación y que solo existe en los formatos fabricados en las instituciones educativas.

Es un acierto grande del gobernador la Primaria Artística desde el mismo nombramiento en la secretaría de Cultura de James González Mata, un hombre con una vasta experiencia tanto en educación como en artística, que supo aprovechar la oportunidad para darle salida a sus anhelos de entregar a los niños de las instituciones educativas oficiales las herramientas para su desarrollo emocional.

James González Mata está rescatando una de las áreas fundamentales contempladas, entre 9, en la ley 115 del 94, la educación artística que la componen las materias de música, teatro, danzas y artes plásticas, que el mismo sistema, la misma cultura educativa ha abandonado por la falta de pedagogos en la materia y que ha sido utilizada por años como un relleno en las asignaturas académicas de los colegios, es decir, que no le habían dado la importancia que se merece y que en los centros docentes solo servía para preparar actividades de izadas de bandera.

Al César lo que es del César y al cura lo que es del cura. La Primaria Artística del Quindío podría cambiar el curso de la educación, no solo en el Quindío sino en el ámbito nacional donde está causando admiración, y ubicando al departamento como el abanderado de una revolución educativa que cambiaría el sistema de manera positiva.

El esfuerzo de la secretaría de Cultura, unido al de la secretaria de Educación e Infraestructura departamental ya está dando resultados palpables, en la práctica y no en el papel, ni en los formatos que tanto daño le hacen a la educación colombiana. El gobernador Osorio Buriticá comprendió que la parte artística es indispensable como elemento formativo en el ser humano, que el arte hace parte de un proceso científico y que va más allá de una simple actividad.

Al gobernador del Quindío, Carlos Eduardo Osorio Buriticá hay que reconocerle este acierto, este proyecto que tuvo su puesta en marcha en el 2015 que ya está dando sus frutos y que estamos seguros en un avance enorme en la educación colombiana, venida a menos en las últimas décadas. El mandatario invirtió en lo que tenía que invertir.

Los recursos invertidos para el acondicionamiento de las estructuras, los más de 30 maestros nombrados licenciados en artística, los trajes, los implementos musicales y para las otras áreas, están haciendo eco en los niños que al igual que sus padres de familia tienen la visión de una convivencia diferente basada en la integración, el goce y el conocimiento. La Primaria Artística que pronto dará su salto al Bachillerato Artístico nos proporcionará una juventud con la formación y el conocimiento para afrontar los cambios sociales, políticos y económicos que urgen en la región.

Como lo dijo en su momento James González Mata, “cuando hay creación hay cambio social y el artista crea constantemente, la parte social previene, educa, y a ello es lo que este gobierno le está apostando, no es solamente lo material, es construir vida a través de las emociones, de la disciplina, la prevención, la educación y de las artes”.