Las lluvias han ocasionado varios derrumbes en el corredor vial entre los departamentos de Quindío y Tolima. Las autoridades controlan el flujo vehicular en el kilómetro 25 +500 metros, en la carretera La Línea entre Calarcá y Cajamarca, sector conocido como Los Chorros.

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Esta mañana se desprendió un alud que arrastró un vehículo tipo turbo, un camión y una carro pequeño. El único automotor que cayó al abismo de 150 metros fue la turbo cargada de naranja, que tenía como destino la ciudad de Bogotá.

EL QUINDIANO habló con Antonio Ramírez, conductor que se salvó milagrosamente de morir tras el derrumbe que se llevó el camión que conducía.

”Estaba dentro de mi vehículo, escuché ruidos en la montaña y se vino una avalancha, por obra de Dios me alcancé a tirar del carro, pienso que fue una segunda oportunidad de vida”.

Diego Herrera, funcionario de la Unidad Departamental para la Gestión del Riesgo de Desastres del Quindío Udeger dijo:

“Encontramos un deslizamiento o fenómeno de remoción en masa, se hizo la inspección y se halló material suelto en la parte alta de la montaña. Igualmente acumulación de agua en el sector, lo que obliga a la instalación de un puesto de mando unificado en coordinación con Invías, Policía de Carreteras, administración municipal de Calarcá y entidades de socorro”.

Entre tanto, Alfonso Meza, director regional de Invías en el Quindío afirmó:”

“Se despejó gran parte del derrumbe que se registró esta mañana, se está dando tránsito restringido y controlado por parte de la Policía de Carreteras a los vehículos que transitan por este sector y en el kilómetro 27 también se recuperó el funcionamiento de la vía. De persistir las lluvias posiblemente se requiera cerrar nuevamente La Línea”.