En la sala de junta de la Asamblea departamental, varios pastores de iglesias cristianas se reunieron con el presidente de la corporación, Jorge Hernán Gutiérrez Arbeláez, para concertar acciones a seguir y prevenir el crecimiento de comportamientos que están afectando gravemente a los habitantes de Quindío.

Todos coincidieron en que los numerosos casos de suicidio están reflejando una problemática que debe ser atendida por todos los estamentos sociales, para lo cual también se requiere de una política oficial que contribuya a contener la preocupante situación que, sin motivación aparente, ha sumido en dolor y llanto a numerosas familias que han perdido seres queridos que resolvieron terminar con sus vidas.

Los pastores, que representan, en conjunto, a cerca de 90 confesiones de fe cristiana con membresías en Quindío, elaborarán un documento con un análisis juicioso sobre el problema, para presentarlo a las autoridades y comunidad, con el propósito de que todos tomemos conciencia y hagamos cuanto sea posible para contener ese flajelo.

Aparte de conversar sobre el tema, los pastores le solicitaron al presidente de la asamblea que sirva como hilo conductor entre ellos y la administración departamental, para que conozca que las iglesias cristinas están dispuestas a trabajar, hombro a hombro, a fin de disminuir los casos de mortalidad por esa causa, hacer de Quindío un territoro en donde prime el amor a Dios y al prójimo, y buscar que las persones tomen conciencia de que la vida es un don que no se debe extinguir por medio de la autodestrucción.