Armenia es de las únicas ciudades colombianas que, desde el viernes pasado, regresó a una vida prácticamente normal, a pesar de que la pandemia del Coronavirus se mantiene, aunque con una gran tendencia a la baja en contagios y muertes.

En Armenia fueron abolidos la Ley seca y el Toque de queda, pero además se amplió el horario de atención al público hasta las dos de la madrugada los días normales de la semana, y hasta las tres de la madrugada los días viernes y sábado, y los lunes festivos.

En Armenia había desaparecido desde mediados del año anterior el pico y cédula, lo que permitió que cualquier persona pudiera salir a la calle, sin mayores restricciones. El Ministerio de Salud abolió también desde la semana pasada tres de los requisitos para ingresar a establecimientos públicos: toma de temperatura, lavado de suelas de zapatos o uso de tapetes para desinfectar y las listas de los ciudadanos que llegaban a los sitios.

En consecuencia, solo se mantiene la prohibición de aglomeraciones, reuniones superiores a 50 personas, y un porcentaje del 30% del aforo de los establecimientos de comercio, incluyendo bares, restaurantes, discotecas y similares.

El uso del tapabocas, el lavado permanente de manos y el distanciamiento social, continúan sin modificaciones.

Sin embargo, lo que se puede observar desde el pasado viernes en Armenia es la vuelta a la normalidad de la ciudad, donde cada vez se ve más gente en las calles, transportes y comercios. También algunos colegios de enseñanza básica, secundaria y bachillerato han convocado a algunos de sus estudiantes a las aulas, en la modalidad de alternancia.

El teletrabajo sigue teniendo un porcentaje muy alto en los empleos del departamento, especialmente de Armenia, pero poco a poco se nota el regreso de la gente a los puestos de trabajo, especialmente los que necesitan atención de público.

En el Quindío hasta este domingo 28 de febrero, se habían infectado 32.879 personas con el Covid-19, y habían muerto 962 personas. Igualmente se informó que seguían activos 1.192 personas, es decir, que aún tienen la enfermedad, de los cuales 82 están hospitalizados, 9 permanecen en UCI y los demás en sus casas, de ellos 632 son mujeres y 560 hombres. En el mismo sentido, se reportó que 30.753 se han recuperado, han superado la enfermedad.

En la última semana la disminución de casos fue notable, pues no han pasado el centenar diario, lo mismo que las muertes. Las autoridades esperan que esas cifras disminuyan esta semana a menos de cincuenta infectados diarios y cero muertos.

En tanto, la secretaría de Salud informó ayer domingo que a la fecha se han aplicado en el Quindío en total 1.673 dosis de la vacuna, que incluye a personal de salud de la primera línea de atención del Covid, y a personas mayores de 80 años, residentes en los hogares de ancianos de todo el departamento.