Fabián Torres es ingeniero agrónomo, caficultor de tercera generación y ganador de grandes premios internacionales por la calidad de su café. Recientemente, el café que nace en su finca, La Morelia, obtuvo la medalla de oro en la categoría de Cafés Tostados, otorgado por la Agencia Europea de Bruselas, Monde Selection.

Su abuelo fue caficultor, lo mismo que su padre. Pero Fabián Torre no se contentó con vender el café pergamino, sino que incursionó en los cafés tostados, logrando tazas excelentes que son envidiadas en todo el mundo.

Una taza de café La Morelia tiene muchas horas de trabajo, excesivo cuidado, desde que se siembra, se pela, se lava, se seca, se trilla, se tuesta, de muele y se prepara con una técnica avanzada de los mejores catadores.

“Tenemos el propósito de crear cafés excelentes, que se conviertan en una exquisitez al paladar del cliente. Nuestro café puede compararse con un vino fino, y puede ser acompañante de carnes y frutos del mar”, comenta Fabián Torres, mientras prepara un café con granos que provienen de una fermentación en cereza, sin pelar y sin lavar, una verdadera novedad en el mundo nuevo del café en taza.

EL QUINDIANO encontró a Fabián Torres en La Morelia, la finca donde se produce, se prepara y se bebe el mejor café del Quindío. Esto fue lo que nos contó: