Luego de cuarenta años dirigiendo la página roja de un diario de provincia, Aristides entre el ocaso de su oficio y el alba de su cirrosis regresa a su pueblo natal. Poco antes de llegar, lo asalta un recuerdo: el cuerpo amoratado como un embutido crudo que vio sacar del río cuando era niño.

Su olfato de reportero huele una historia. ¿De quién es ese cuerpo? ¿Quién lo eliminó como a tantos otros en su país? Investigar esta desaparición será como abrir una lata de la que emergen corrupción, silencios opresivos y violencia renovada, además de una inesperada conexión con su novia de su juventud y su sombrío esposo.

Todo esto trazará un triángulo tenso entre amor, crimen y prensa en un lugar decadente donde la verdad es a veces rastrera, a veces trepadora.

Con un lenguaje travieso y mordaz, el escritor colombiano Luis Luna Maldonado logra retratar en su novela Muertos bajo tierra fértil el delicado balance entre el horror y la esperanza, esas piezas que aparecen al desenterrar recuerdos de cadáveres y amores extraviados.

Un triángulo tengo entre amor, crimen y prensa:

"Título: “¡Lo mató! Se la jugaba con un futbolista”. Subtítulo: “Ira e intenso dolor, de trece puñaladas despachó al marido infiel”. Esa fue su primera entrada en la página judicial de La Tribuna, que agotó su edición antes de que acabara la siesta en CiudadSartén. De alguna manera que no se explicó muy bien, entre el titular y las fotos de Mina, más la expectativa de cuál era el crack del fútbol implicado en el crimen, pusieron a Aristides en posición de entrar definitivamente a la
plantilla del periódico, más si el redactor de la sección estaba ausente por una oferta de trabajo en la capital del país y que en la sala de redacción no daban abasto con la visita del Presidente de la República; así, la emergencia dio paso a la llamada del joven aprendiz para que se encargara del tema, para esa jornada, cosa menor". Página 21.

"Albertina sabía de primera mano toda la tragedia juvenil entre ellos dos; cómo no enterarse de que la muchacha tenía loco al joven, cómo no saber la sandez de ella de haberse juntado con el advenedizo, cómo no haber tenido que compartir la angustia con su madre al irse el joven sin avisar, o aguantarse la furia del papá que nunca le perdonó haberse escapado “como un cobarde” y lo condenó negándole cualquier ayuda y mucho menos “ni un solo peso”. A ella también se le había abierto una brecha en su rutina; la huida de Aristides había supuesto para ella un vacío de quien, así fuera el hijo de sus patrones, de cierta manera miraba como a un hermano menor". Página 173.

Sobre Luis Luna Maldonado:

Redactor y creativo publicitario. Ganador del XX Premio Ñ Clarín de Novela 2017 con la obra Aquí sólo regalan perejil, publicada en Argentina, Colombia y España, nominada al VPremio Biblioteca de Narrativa Colombiana 2019. Publicó con el sistema de crowdfunding ellibro de relatos Cortoletrajes, historias comunes sobre gentes corrientes (2013) y el librorecopilatorio del libelo cultural papelHigiénico-Ilustrado (2016). Fue seleccionado en dosocasiones para el Salón Nacional de Artistas de Colombia y dirigió el Museo de ArteModerno Ramírez Villamizar de su natal Pamplona (Colombia). Es también columnista deldiario La Opinión, El Nuevo Siglo y dicta talleres literarios.