Desde el 13 de junio de 2022, casi un año ya, hemos denunciado lo que sucede en el sector de Las Américas, a un lado del Peaje Túnel de La Línea Quindío. Allí hay un inmenso botadero de material de corte e inertes (material sacado de los túneles) que se estableció de manera irregular, sin las debidas obras de ingeniería que garantizaran su estabilidad. Y un depósito de chatarra que se pudre al sol y al agua desde hace años.

El botadero se encuentra en suelo empinado, en la vertiente hacia el río Navarco. Es evidente su inestabilidad y es fácil prever que si se derrumba hacia el río podría llegar a represarlo y causar daños aguas abajo. Pero el INVÍAS, la CRQ y una supuesta “Veeduría técnica de las obras del túnel de La Línea”, que no ve nada, se han empeñado en decir mentiras y tratar de ocultar el problema maquillándolo. Eso se puede constatar en seis (6) publicaciones, documentadas, que hemos hecho el último año, en redes, y a las cuales algunos medios han hecho eco.

Llama la atención la ausencia de los órganos de control del Estado y del sistema regional de prevención y atención de desastres que poco o nada han dicho o hecho al respecto. Este es un caso más que motiva a salir a la VIII Marcha Carnaval Quindío en defensa del agua, la vida y el territorio el próximo viernes 9 de junio de 2023. A ver si próximos gobiernos regional y locales, y nuevas autoridades, se ocupan en serio de estos asuntos.