Inconforme con la situación que vive diariamente como consecuencia del bajo precio del café que produce en su finca de Salento, Fernando Muñoz Sánchez un pequeño cultivador del grano perteneciente al movimiento Dignidad Cafetera hizo parte del plantón protagonizado en la plaza de Bolívar de Armenia.

Este humilde hombre del campo explicó que el plantón es para manifestarse ante el gobierno nacional y la Federación de Cafeteros por la apatía demostrada con relación a la situación tan dura que enfrentan los caficultores colombianos por los bajos precios del grano.

Dice el agricultor que la situación es muy difícil cuando ni siquiera se puede tener un mínimo de ganancias en la producción de café, además del pésimo estado de las vías rurales, lo que tiene el campo en condiciones muy graves.

Sin eco

Lamentan los campesinos del Quindío no encontrar mayor eco en la población colombiana, pese al inconformismo que hay en el campo y se refieren al anuncio del presidente Duque sobre el apoyo de $100 mil millones, reconocen que es una cifra considerable que se debe repartir en 550 mil familias cafeteras en Colombia, lo que convierte los recursos en irrisorios, teniendo en cuenta el precio por debajo de los $ 70 mil la arroba, lo que significa que cada uno recibirá solo $2 mil 500 pesos por arroba, eso no es justo, los caficultores no son mendigos, ni limosneros, concluye Muñoz Sánchez.

Los agricultores llegaron hasta la plaza de Bolívar de Armenia con sus productos representados en plátanos, yucas, mandarinas, aguacates, guayabas, arracachas que regalaron a quienes pasaron por el lugar, para demostrarle a las autoridades que es mejor traerlos y donarlos a la gente, que lo que les representa económicamente a las familias del campo.