Cerca de dos mil personas víctimas del conflicto armado se benefician de los procesos de recuperación emocional que adelanta la Unidad para las Víctimas en los tres departamentos del Eje Cafetero, Risaralda, Quindío y Caldas, en desarrollo del manejo de estrategias grupales e individuales en los casos que más atención especializada requieren.

Son 12 los profesionales en psicología que prestan sus servicios para ayudar a sanar las heridas que ha dejado la guerra en personas que han padecido los horrores del desplazamiento forzado, desaparición forzada u homicidio de sus familiares.

Nuevas sesiones

En el caso del departamento del Quindío, la entidad adelanta en este momento procesos en Quimbaya, Génova y La Tebaida con procedimientos que tienen una duración aproximada de tres meses, desarrollando nueve sesiones de terapia con profesionales que centran su ejercicio en la recuperación y actividades de rehabilitación encaminadas al bienestar de los integrantes del grupo.

Sobre el particular, Freddy López Ramírez, director territorial de la unidad en el Eje Cafetero, señaló que “aunque la reparación económica es un elemento primordial para mejorar la calidad de vida de las víctimas en todo el territorio nacional, si esa reparación material no está acompañada de un trabajo emocional fuerte nada habremos hecho, lo primero es curar los corazones y después mirar la manera de inyectar capital para el cumplimiento de los sueños que se destrozaron con el conflicto”.

Reconciliación

En Armenia, conjuntamente con la Agencia para la Reintegración y la Normalización, se trabaja en un proceso de reconciliación entre algunos los integrantes de la Mesa Departamental de Víctimas y excombatientes, inicialmente atendiendo a cada segmento por separado y a la espera de iniciar las sesiones comunes que permitan subsanar las diferencias, mediante actividades en equipo para darse la oportunidad del perdón.

Adicionalmente en el Eje Cafetero, se han atendido cerca de 120 casos en respuesta a los procesos de restitución de tierras, en donde los jueces han definido que las víctimas requieren de participar de la atención psicosocial, por lo menos 6 de estos casos han tenido uno connotación muy especial, ya que el informe de los profesionales psicosociales de la unidad tras reunirse con las víctimas, ha servido para modular las sentencias iniciales, siempre buscando mejorar las condiciones de vida y la salud emocional de los implicados.