La discriminación y los mitos son uno de los principales obstáculos para enfrentar la enfermedad de Hansen o Lepra. La idea es trabajar para eliminar las barreras sociales a los pacientes con un diagnóstico de esta naturaleza.

Una persona discriminada o señalada tendrá menos motivación para realizarse la prueba, buscar información, apoyo y protección. “Esto es grave, pues un paciente que no consulte oportunamente puede contagiar a otras personas o agravar su situación, si no realiza el tratamiento oportuno y adecuado”, señaló el secretario de Salud del departamento de Risaralda, Javier Darío Marulanda Gómez.

La Lepra es una enfermedad infecciosa crónica causada por una bacteria también conocida como bacilo de Hansen, afecta principalmente la piel, los nervios periféricos, la mucosa de las vías respiratorias altas y los ojos.

En el marco del Día Mundial de la Lucha contra la Lepra, que se celebra este 26 de enero, la autoridad sanitaria presenta las siguientes recomendaciones para no estigmatizar a las personas que tienen este tipo de enfermedades.

Antes de señalar infórmese bien, ya que los mitos o falsas creencias son uno de los principales factores que contribuyen al señalamiento o estigmatización. Si los casos de lepra se conocen a tiempo se pueden controlar y curar.

Evite los prejuicios, las ideas erróneas y estereotipadas hacia las personas.

Cuide sus palabras, pues el lenguaje es otro de los factores con los que de manera consciente o inconsciente se discrimina a las personas.

Evite conductas de rechazo, menosprecio y distancia social con las personas enfermas.

De acuerdo con el coordinador del Programa Tuberculosis y Lepra de la secretaría de Salud, Alberto Medina Córdova, la transmisión de la Lepra se da en forma directa, “de persona a persona”, por inhalación de secreciones de la nariz y boca de la persona infectada que no recibe tratamiento. Sin embargo, esta transmisión se presenta cuando la convivencia con un enfermo no tratado es de 3 a 5 años.