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Región  |  16 febrero de 2021  |  12:00 AM |  Escrito por: Rubiela Tapazco Arenas

Es urgente fortalecer el Hospital La Misericordia de Calarcá, donde el dinero no fluye como debiera

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Fortalecer el hospital La Misericordia de Calarcá y devolverle la categoría de institución de segundo nivel, es el propósito del gerente de la entidad Bernardo Gutiérrez, quien afirmó que para ello se necesita integrar un grupo departamental que permita sacar la institución adelante.


El funcionario indicó que la entidad tiene una cartera en cuantía de $11.000 millones que viene de tiempo atrás y fue lo primero que se encontró la actual administración tras observar que el dinero no llega, ni fluye como debiera.


Informó que el hospital terminó el año 2020 con problemas financieros, sin embargo, empezó esta vigencia con alivio en las deudas que traía con auxiliares de enfermería y médicos especialistas, a quienes se les ha cumplido con parte de los compromisos adquiridos.


El director del Hospital La Misericordia de Calarcá, Bernando Gutierrez, fue claro al señalar que aunque la institución es de segundo nivel, se han comprimido los servicios en forma paulatina y ha dejado de prestar muchos que son esenciales para continuar en el negocio, entre ellos, el cierre de numerosas camas y servicios que eran de 24 horas, los recortaron a 6  y nadie dijo nada.


Afirmó que desde su llegada ha recuperado paulatinamente la prestación de estos servicios como lo exige la ley, ya que el gerente a su libre albedrío no puede reducirlos y por el contrario, se están vendiendo las 24 horas y ya cuenta con EPS privadas como Policía y Ejército con quienes se tienen los respectivos contratos.


Agregó Gutierrez, que presupuestalmente no cuenta con los recursos para disponer de cierto personal para una eventualidad o emergencia que se pueden presentar en cualquier momento, situaciones frente a las cuales los gobiernos deberían ser más realistas.


Falta coherencia en las instituciones hospitalarias que tienen un manejo muy diferente a las otras entidades, debido a que prestan un servicio muy especial que requiere prontitud y se debería disponer del recurso humano para cuando se desbordan los servicios.


Frente a la realidad del covid-19, en el hospital de Calarcá se cumplen las exigencias relacionadas con las adecuaciones lo que ha ocasionado mayor gasto de recurso humano.


En ese sentido la institución acondicionó el área de covid, debidamente separada de las urgencias, con ingreso por otro sector, además se tiene seleccionado en el tercer piso otro espacio en donde se pueden acomodar 24 camas, cuatro de ellas para cuidados intensivos y los recursos en caso de necesitarse.

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