El ministro de Defensa, Iván Velásquez, indicó que hay que persistir en la paz y el diálogo, de la mano de una intervención integral que involucre la presencia militar y social, para garantizar unas mejores condiciones de vida de las poblaciones afectadas en los territorios, pese a la suspensión del cese al fuego con el Estado Mayor Central (EMC-Farc) en Meta, Caquetá, Guaviare y Putumayo.

El titular de la cartera de Defensa expresó que la Fuerza Pública empezó a disponer las acciones ofensivas que se “deben retomar en virtud de esa suspensión”.

Explicó que “hay una evaluación respecto de la presencia de Fuerzas Militares en estos cuatro departamentos; las ubicaciones en las que podrían encontrarse el Estado Mayor Central, pero en todo caso lo fundamental de las Fuerzas Militares y la Policía Nacional es poder brindarle tranquilidad y seguridad a la población”.

De acuerdo con Velásquez, la instrucción impartida a todos los ministros del Gobierno es la presencia integral del Estado en los territorios afectados por la violencia, que permita la recuperación del control ilegal del territorio y el desarrollo de los programas sociales.

Para esto, se viene trabajando con “unos ministerios, específicamente, como los de Agricultura, Salud y Vivienda, para definir acciones específicas de intervención integral” y “generar mejores condiciones de vida para la población. No es solo presencia militar, sino también presencia del Gobierno para desarrollar los programas sociales, que la gente sienta los beneficios de una seguridad que se pretende establecer integralmente en estos territorios”, señaló.

Finalmente, respecto a una pregunta sobre la posibilidad de decretar un estado de excepción en los departamentos anteriormente mencionados, enfatizó que “no es un tema que se haya planteado en el Gobierno”.