Un inusual decreto expidió el gobernador del Quindío Roberto Jairo Jaramillo Cárdenas, con el número 00195, donde declara el 18 de marzo día de oración para contener el coronavirus. Según el decreto hay que orar 10 minutos, cada hora, durante todo el día. El decreto dice en su parte final, Publíquese, Comuníquese y Cúmplase.

La medida fue tomada con entusiasmo por muchos católicos del departamento del Quindío, que aplaudieron en las redes sociales la decisión de Jaramillo. Otros más la criticaron, indicando que para orar no es necesario hacer un decreto del gobierno, y que los decretos del gobierno no pueden utilizarse para invitar a orar, porque la Constitución Política de Colombia declaró desde 1991 a Colombia como un Estado Laico. “La sentencia C-350 de 1994 declara que Colombia es un Estado laico y pluralista, fundado en el reconocimiento de la plena libertad religiosa y la igualdad entre todas las confesiones religiosas”, y también con quienes no tienen ninguna religión ni creencia religiosa.

Abogados que conocieron el decreto dijeron que el gobernador no puede obligar a nadie a cumplir este decreto, como dice el mismo en su parte final, pues viola la norma constitucional de la libertad de cultos.

Varios académicos consultados por EL QUINDIANO dijeron que respetaban la posición de invitar a orar por decreto para contener el coronavirus, pero pareciera una actitud de impotencia frente a lo que verdaderamente debe hacer un gobierno: tomar medidas reales, científicas, jurídicas, económicas, de orden público, en terminales de transporte, en aeropuerto, en supermercados, para contener el contagio, lo que se ve poco en el Quindío.

“Mientras el gobernador está orando 10 minutos cada hora del día, al aeropuerto El Edén de Armenia lo declaran como uno de los terminales aéreos donde hay más deficiencia en los controles sanitarios para contener el virus”, dijo uno de los consultados.

Las opiniones sobre el controvertido decreto no se hicieron esperar en redes de WhatsApp, Facebook y otras. Algunas de ellas son las siguientes: “Mientras en Bogotá y en Boyacá empiezan los ensayos para sacar el decreto de cuarentena, en el Quindío expiden un decreto para orar. “Mientras 13 ciudades disfrutan desde ayer de la rebaja de $1.200 pesos en el galón de gasolina, en Armenia y el Quindío los expendedores le ‘maman gallo’ a la medida, con la anuencia del gobierno, que ahora se dedica a orar, en vez de actuar”.

“Mientras el gobernador decreta un día de oración, la Iglesia Católica del Quindío toma todas las medidas, incluso drásticas, para evitar los contagios de coronavirus, antes que ponerse a rezar”.

Finalmente, el comentario más generalizado en redes es que cuando un gobierno se cree incapaz, la única alternativa que le queda es encomendarse a Dios.