• JUEVES,  25 ABRIL DE 2024

Columnistas  |  28 enero de 2021  |  12:00 AM |  Escrito por: María Nelly Vanegas Agudelo

EL VERDADERO SER DETRÁS DEL PERSONAJE

0 Comentarios


María Nelly Vanegas Agudelo

María Nelly Vanegas A

Consternación causó en los medios políticos la muerte del Doctor Carlos Holmes Trujillo García. Los medios informativos magnificaron su fallecimiento, como generalmente lo hacen, ante personas que de alguna manera se han destacado en el ejercicio de su profesión, o que por cualquier otra razón han sobresalido. Esto causa escozor entre algunos ciudadanos

La muerte de cualquier ser humano nos conduele, pero solo la familia y sus más íntimos, verdaderamente lo sienten, Los noticieros, casi que dirigen los sentimientos de un público que apenas conoce al personaje, exaltando sus méritos; pero muchas veces olvidándose del ser humano que está detrás del actor. Solo aclaman sus victorias olvidándose que ese mismo día muchos han partido y ni los han mencionado

Todos los días mueren personas. En el último año son muchísimos, ya se han contado millones por la pandemia, otros por la violencia otros por otras enfermedades, otros por accidentes y otros muchos por guerras o conflictos. La mayoría quedan en el anonimato, es como si fueran ciudadanos de segunda y solo se convierten en un número más que entra a formar parte de una estadística

La humanidad es dada a exaltar a ciertas figuras y convertirlas casi en héroes olvidándose del ser humano que hay detrás de él e ignorando a todos los demás que como especie tienen también historias, construidas en la cotidianidad, con grandes sacrificios, luchas, sufrimientos y logros personales que aportan muchas veces en silencio tanto a sus familias como a la sociedad

No conocí a Carlos Holmes, pero oí hablar de él y de su padre en mi familia, sus padres fueron vecinos de mi abuela en la ciudad de Cartago, hermoso pero olvidado pueblo por muchos de sus nativos, quienes migraron buscando mejores oportunidades en otros lugares y al encontrarlas se afincaron en ellos olvidando según sus moradores sus orígenes

De pequeña iba de vacaciones a casa de mi abuela. En las tardes, salíamos a recorrer las calles del pueblo bajo el sol más alegre de Colombia, cuyos rayos eran atenuados por la suave brisa de los hermosos Samanes, ceibas, carboneros, y gualandayes que adornaban casas grandes con jardines de prados salpicados con pensamientos y otras flores de todos los colores

A este paisaje se unía la majestuosidad del rio la vieja que nace en el Quindío bordeando este departamento, así como El Valle y Risaralda hasta unirse al rio Cauca después de recibir las aguas de un sinnúmero de quebradas

En sus aguas cristalinas en aquella época se bañaban los niños al salir de las escuelas, allí precisamente Monseñor Pedro Rubiano otro cartagüeño aprendió a nadar y cuando acababa la diaria jornada escolar, en vez de salir para la casa, según contó en alguna entrevista se iba para el río con los compañeros y se echaban un chapuzón

Allí también las lavanderas lavaban las ropas de las familias pudientes, secándolas extendidas en los pastos, por aquella época no contaminados de residuos ni basuras, era un hermoso espectáculo de mujeres trabajando para llevar el pan a sus hijos

Parques, casonas e iglesias de estilo colonial daban un encanto a este pueblo hermoso, cuna de algunos hombres que se hicieron famosos e importantes en su andar profesional, emergidos de buenas y humildes familias que se caracterizaron por su laboriosidad y tesón pero que ellos en su trasegar dejaron atrás olvidando sus orígenes

Entre estas familias estaba la de Misia Cresilda, bisabuela de Carlos Holmes y abuela de doña Genoveva y Alba García todas mujeres de grandes virtudes y, como muchas servicial en su comunidad; ella, misia Cresilda, iba por las casas recogiendo las niñas pequeñas de diferentes familias para llevarlas al colegio María Auxiliadora, de las madres franciscanas venidas de Suiza y Alemania; y luego, cuando terminaba la jornada las recogía del colegio y las entregaba a sus familias

Carlos Holmes padre, con una voz contundente y musical fue reconocido locutor de la emisora Hondas del Valle, manejaba el léxico con gran maestría por lo cual según las historias oídas en casa de mi abuela la gente se embobaba oyéndolo. Su elocuencia le valió el primer premio mundial de oratoria concedido en Italia

La familia salió de Cartago para radicarse en Cali donde tanto padre como hijo sirvieron a la ciudad, lo que produjo cierto descontento entre los cartagüeños que han aspirado a que sus hijos la tengan presente en sus éxitos y se acuerden de ella desde sus cargos para darle un empujoncito en su desarrollo. No ha sucedido así, porque la vida va muchas veces llevando por caminos con frecuencia impensados a cada ser o porque a ellos en su afán de éxito se les olvida su pequeño pueblo. Van tras la gloria!

Su muerte como la de muchos personajes públicos generó controversias, nos olvidamos que ante ella todos somos iguales así que para cada ser que deja este mundo, debe haber siquiera un pensamiento de todos los demás de sana despedida, es lo menos que podemos hacer. Y para los deudos de ellos, nuestro acompañamiento y solidaridad incondicional en esas duras horas de desolación, porque como decía mi abuela: hoy por ti mañana por mí y como dice un fragmento del poema de A Kempis: “más como afirman doctores graves, que tu maestro, citas y nombras, que el hombre pasa como las naves, como las nubes como las sombras…”

PUBLICIDAD

Comenta este artículo

©2024 elquindiano.com todos los derechos reservados
Diseño y Desarrollo: logo Rhiss.net