Por medio de un comunicado publicado ayer sábado y enviado por redes sociales, el ambientalista Néstor Ocampo, director de la fundación ecológica Cosmos, denunció la aparición de varias grietas cerca de la carretera, así como la inestabilidad del terreno de lo que considera un botadero de materiales.

Igualmente Ocampo manifestó que en cuanto a la aparición de las grietas, “Es algo que tratan de ocultar camuflando las grietas con polisombra verde”, dice en el comunicado, agregando que no hay acciones concretas ni respuestas por parte de las entidades públicas y responsables de darlas como Invías, la CRQ, la.UDGRD Quindío, la alcaldía de Salento y demás entes de control del Estado.

Según la publicación, hace 8 meses se denunció la acumulación de material de corte e inertes en varias terrazas a un lado del Peaje Túnel de La Línea, en la vertiente al río Navarco, que ya presentaba grietas y derrumbes.

El 21 de junio, una semana después pudieron demostrar que INVÍAS, la CRQ, y la Veeduría, dice el comunicado “MINTIERON al afirmar que todo se estaba haciendo bien. En video y fotos se ve claramente cómo crecen grietas y derrumbes”.

Asimismo agrega:

“Cuatro meses después, el 17 de octubre, insistimos en señalar que el INVIAS, la CRQ, la supuesta “Veeduría Técnica” y la Alcaldía de Salento, seguían MINTIENDO al afirmar que a las obras de drenaje y terrazas se les “hace constante mantenimiento y han funcionado de forma adecuada sin presentarse riesgo hacia la zona de Navarco”. En ese momento preguntamos por el papel de la Unidad Departamental de Gestión del Riesgo de Desastres (UDGRD) ante lo que estaba sucediendo".

El activista asegurá que al diciembre 17 del año pasado, es decir seis meses después “volvimos a alertar, con carácter de “URGENTE”, sobre la “AMENAZA DE DERRUMBE SOBRE EL RÍO NAVARCO” y reclamamos por la ausencia de los Órganos de Control de Estado y de la UDGRD Quindío, porque ese depósito de material se seguía derrumbando hacia el río Navarco, y porque no se había hecho nada ante las denuncias, solo “maquillar” la situación".

Al día de hoy, 8 meses después, se insiste en las denuncias y por lo que explican en el material fotográfico adjunto en el comunicado, las grietas están llegando y formándose cada vez más cerca.

Según la denuncia dada a conocer “Es fácil prever que si esas terrazas se derrumban podrían represar el río Navarco y causar un desastre aguas abajo. La amenaza es mayor si consideramos el invierno que aún no cede, los recurrentes sismos en la región y la vibración que causa el paso constante de automotores pesados por el sector”.