Así lo revela el octavo estudio de percepción ¿Qué piensan, sienten y quieren los jóvenes en Colombia? de la Universidad del Rosario. En esta oportunidad se encuestaron 2001 jóvenes entre los 18 y 32 años, de todos los niveles socioeconómicos y pertenecientes a Medellín, Barranquilla, Bogotá, Montería, Quibdó, Pasto, San José de Cúcuta, Pereira, Bucaramanga, Cali, Arauca y San Andrés.

 El estudio arrojó que el 62 % de los jóvenes encuestados aún no sabe por quién votar para la Gobernación de su departamento, el 65 % para la Alcaldía de su municipio, el 70 % para la Asamblea de su departamento, el 72 % para el Concejo de su municipio y el 79 % para las Juntas de Administración Local, y eso que el 73 % de los jovenes encuestados creen que votar es una forma de ayudar a transformar y solucionar los problemas del país.

A la hora de escoger por quién votar, los jóvenes tienen en cuenta principalmente, las propuestas del candidato (56 %), el perfil del candidato (38 %), ideología del candidato (26 %), los debates políticos entre candidatos (22 %) y las conversaciones con su familia (17 %).

También consideran lo que ven, leen o escuchan en medios de comunicaciones independientes (11 %), voz a voz (10 %), el partido político o movimiento del candidato (10 %), lo que ven, leen o escuchan en medios de comunicaciones tradicionales (10 %), las que dicen sus amigos (8 %), lo que ven o leen en redes sociales (7 %), el resultado de las encuestas (6 %) y la popularidad del candidato (5 %).

Sin embargo, pensando en las elecciones del próximo 29 de octubre, a los jóvenes les gustaría escuchar propuestas de los candidatos relacionadas con apoyar el primer empleo a jóvenes (46 %), mejorar la seguridad (45 %), promover el emprendimiento (34 %), mejorar calidad y atención de centros de salud y hospitales (25 %), crear colegios nuevos o mejorar los existentes (23 %) y disminuir la corrupción (21 %).

Para finalizar a los jóvenes las próximas elecciones regionales les generan esperanza (54 %), sorpresa (47 %), miedo (28 %), desagrado o asco (22 %), tristeza (17 %), alegría (16 %) e ira (11 %).

Esto determina que, primero, la indecisión de los jóvenes colombianos frente a la política es inmensa y segundo, que en los departamentos y municipios de la gran mayoría del país, los distintos candidatos no tienen programas reales y fuertes dirigidos a los jóvenes.

Este estudio revela que para los jóvenes no hay con qué hacer un caldo, como se dice vulgarmente.